WOE II TEMA OFICIAL

Los aventureros se acercaron simulando perfecta calma. Anakair desde su caballo bajó la cabeza en señal de saludo y luego levantó la mano como lo aria cualquier viajero. Los monjes replicaron con el mismo gesto, y siguieron el camino.
- Anakair…. Esto no me gusta… - le dijo Gena en voz baja cuando se iban alejando
Terry se acercó.
- Calma…- le susurro, pero sus ojos no aparentaban calma – lo tienes?
- Si
- ¡No hablen de esto ahora! Gena te quedaras cerca de Jana- le dijo Anakair – como lo practicamos. Tu pendiente está brillando…. Para eso que puede ser peligroso
- no se pararlo
Jana se había frotado los ojos con un bálsamo extraño y observaba con inquietud la escena
-chicos no discutan, esto es una trampa. Si seguimos el camino un poco más allá cerca donde esta ese árbol- señaló Jana- en el precipicio hay alrededor de diez hombres y en la piedra al otro lado hay dos hombres escondidos… creo que uno es un mago.
-¡Cuidado!– Terry tiró a Gena a un costado y desenvainó su espada.
Del barranco más cercano aparecieron otros monjes guerreros. Eran siete y empezaron a atacar a Terry y Anakair con intenciones de acercarse a Gena.
- ¡Lo tiene la enana!
Los monjes que se habían alejado ya estaban luchando contra Sjekir, Lynel y Rik. Los del precipicio surgieron de su escondite y empezaron a correr en dirección a Gena. De repente empezaron a caer rocas de la montaña. El alboroto encabritó al caballo de Anakair.

Rik atinó, aferró a la enana de la cintura y se tiró al barranco con ella, esquivando a los guerreros. Al llegar al fondo Rik aparto a Gena a unos arbustos
-¡Rik que haces! No hay que separarnos del grupo
-Dame el collar, ya saben que tú lo tienes
Pero un presentimiento extraño la inundo por dentro, y su joya familiar seguía brillando con mayor intensidad
- No es parte del plan, Yo tenía que irme con Jana
- No seas necia, el plan no funciono
- ¡Quién eres! No te la pienso dar
- Tu funeral
Rik se abalanzó hacia Gena y trato de arrancarle el collar. Ella se defendió mordiéndolo. Y Saco su pequeña espada
Rik dio un super salto a un costado alejándose de Gena y se rió
- ¡REGO TERRAM! – gritó Rik
El barranco empezó a temblar y una avalancha de piedras se aproximaba a Gena. Gena gritó trato de huir pero no puedo.
Rik sonrió triunfante
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Mientras tanto los chicos peleaban contra los soldados. El caballo de Anakair lo había arrojado al suelo. Rik y Jana fueron corriendo en búsqueda del caballo y Terry a la defensa del paladín.
Los mojes guerreros eran más que antes. Y sus movimientos de defensa y de pelea eran cada vez más repetidos. Jana trataba de divisar a Gena montada en el caballo de Anakair sus ojos bajo el efecto del bálsamo pero aun no la divisaba.
- Lynel estacó a un monje por la espalda.
- Juro que ya lo había matado.-Dijo empujando el cuerpo con sus brazos encima de otro guerrero.
Sjekir, mientras degollaba a su contrincante le observo la cara, y luego se preparó para matar al siguiente, solo que este era igual al que ya había asesinado.
- Si, son los mismos, una y otra vez… esto es un conjuro
- ¡Ahí está! – Gritó Jana mientras el caballo arrollaba a los soldados - está peleando con… con…… Rik.
- ¡Que! pero si yo estoy aquí a tras tuyo
- ¡Vamos! Hay que ayudarla – grito Terry corriendo hacia el barranco

En ese mismo momento la tierra tembló. El caballo se encabrito de nuevo. Jana trato lo posible de calmarlo. El suelo cerca del barranco cedió. Escucharon un grito que provenía de más abajo. Vieron como las piedras caían encima del cuerpo de Gena. Anakair ignoro a los soldados y salió corriendo bajo el barranco. Terry lo siguió con Jana y Rik. Lynel y Sjekir se quedaron atrás, peleando contra los monjes guerreros
Al llegar abajo vieron como un Rik levantaba rocas con sus poderes para encontrar al cuerpo de Gena y arrancarle la joya.
- Bastardo! Esa es mi forma! - gritó Rik
Terry y Anakair se abalanzaron encima del falso Rik. Pero el falso Rik fue más rápido, salto hacia arriba, levitándose en el aire.
- Rego Terram! – grito de nuevo y la tierra en los pies de Anakair se le ajustaron encima de su cuerpo hasta las rodillas como si fuese agua, en mili segundos. Anakair quiso alejarse y no alcanzo a reaccionar antes que funcionara el hechizo. Cayó al piso, doblándose las piernas.
Terry alcanzo a escapar del hechizo y corrió hacia el sujeto. Quien saltaba como si tuviera halas en los pies.
Mientras tanto el verdadero Rik y Jana sacaban las piedras para encontrar a Gena. Cuando la hallaron estaba hecha una pelota, abrazando a sus pies. Una burbuja de color morado la protegía. Abrió sus ojos y se tiró encima de Rik, estrangulándolo
- Tu maricon, malvado ¡”•$%&/!!!
- Gena,….huh…. soy yo….
-¡Rik! - Lo abrazo afectuosamente
- Que bueno que estés bien Gena- Jana le sonrió y salió corriendo a ayudar a Terry.
Jana corrió hacia al falso Rik y lo disparó con una flecha que le dio en el costado. Terry corrió hacia él, saltó y con una patada lo derribo del cielo. El supuesto Rik Calló a las rocas como si fuese un pájaro derribado.
- ¡Sujetalo! – Grito Anakair desde el suelo – no lo mates, hay que cuestionarlo primero
Terry agarró al supuesto Rik y se lo llevo arrastrando hacia Anakair. En ese momento bajo el barranco Sjekir y Lynel.
- Los soldados se desvanecieron- dijo Lynel
- sí, Terry agarro al hechicero y yo lo dispare
-Desase el hechizo de las piernas de mi amigo ahora, si no quieres perder la vida! – le grito Terry al falso Rik
Pero el falso Rik se rió mordió sus uñas y empezó a convulsionar
- ¡Mierda! ¡Se está suicidando, Jana has algo!- Dijo sjekir corriendo hacia el falso Rik y abofeteándolo para ver si respondía
- Si le sigues pegando no lo puedo….. se murió. – Jana suspiro viendo el cuerpecito del supuesto Rik. – qué raro que no haya cambiado de forma… puede que use una pócima que desconozco….
- no me miren, yo soy yo – dijo Rik tiritando
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Jana estuvo ocupada esa tarde. Por un lado, separar las piernas de Anakair del suelo fue difícil sentía la falta de un mago como Alvenith o Anvyl. Después de eso, tuvo que curarlas. Eso, no era difícil para ella, el problema era que le quedaban pocas hierbas. Por otro lado, estuvo observando la joya de la enana. Era extraña y no la comprendía del todo, pero parecía reaccionar ante peligro mágico o al miedo. Cuando llegaran al bosque de las almas perdidas sabrían exactamente lo que es.

Rik por su parte, esa noche no pudo dormir. Mientras comían y marchaban él y Terry habían bromeado mucho de su doble. Obvio que él era mucho más atractivo que esa sucia basura. Y de que el con su astucia habría logrado robarse la joya de una forma mucho más eficiente. Hasta lo había planeado un par de veces. Como ladrón es parte del oficio. Pero la verdad era que poco se podía reír del asunto. No quiso admitírselo a Terry, la imagen de su cuerpo muerto le afecto enormemente. Ver como tiraba piedras para matar a su compañera, como sus compañeros le pegaban como si fuese un saco de papas. A su amiga dispararlo y lo peor ver a su amigo arrastrarlo por el suelo. No era el, se dijo en la noche cuando trató de dormir, no era él, era otro… si era otro….

Una mujer en la penumbra observaba toda la batalla que acababa de acontecer, llevaba una mascara blanca que denotaba un rostro estoico, y una larga túnica negra y había detallado toda la pelea.

- Muy interesante, a mi señor le gustaran mucho estas noticias.

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Rik se desperto al otro dia, se rasco la cabeza, sintió un enorme peso en el estomago. Terry dormia con la boca abierta encima de el. Parecia balbucear algo entre sueños.

- Ah! Que linda que estas, ven aquí linda, si, eso es, asi, asi…lentamente…- mientras decía esto empezo a acariciar a Rik
- Eh tu! Quítate de encima!- grito Rik

Rik empujo a Terry y este se dio un fuerte totazo contra la raíz de un árbol cercano a donde dormían.

- Auch…eso dolio, ¿que te pasa pequeño renacuajo? ¿no ves que tenia un sueño muy agradable?
- Eso no lo dudo- dijo Rik molesto e ironico
- Eh, ¿Dónde estamos?- dijo Terry aun adormecido y sin tomar consciencia.

Unas pequeñas luces alumbraban alrededor

- Es el bosque Kolima- dijo triste Rik- preámbulo del cruce de Tenacrox, al cual llegaremos hoy pasando al reino neutral de Amnadia.
- Asi es- dijo Anakair quien parecía surgido de la nada- y debemos proseguir si queremos cruzarlo hoy mismo.
- No podemos dormir dos horas mas?- pregunto Terry
- No- dijo Anakair escueto y serio
- buuuu…

Todos se despertaron, desayunaron y prepararon sus cosas

- Al final salimos de Thalion- dijo Sjekir- no puedes dejar de sentir cierta sensación de claustrofobia mientras estas aquí. Rodeado por montañas…
- A mi no me parecio un reino feo- dijo Lynel
- Yo me siento mejor entre los arboles- dijo Jana- además aquí podre encontrar algunas hierbas que difícilmente podría encontrar en Minas Thalion.
- No obstante, recuerden lo que dicen- dijo Anakair- debemos tener cuidado, luego de que crucemos el cruce de Tenacrox, saldremos de la jurisdicción de Thalion. Toda esta zona esta custodiada por los caballeros. Luego de que salgamos de aquí, entraremos en los terrenos inestables de Amnadia.
- Eso significa- dijo Gena- Que al menos hoy tendremos un dia tranquilo…si, me gusta. Aun que, los bosques no son presisamente los lugares donde mas me gusta estar. Quiza podríamos hacerle una visita a Amnadia, dicen que es bueno para el mercado…
- No entraremos a Amnadia a menos de que sea necesario- dijo Anakair temeroso- los rumores que llegan de alla no son buenos. Prefiero trazar la ruta hacia Dakar, un pequeño pueblo al sureste de Amnadia-ciudad, luego podemos ir hasta Terranos capital de Saalazar y de allí finalmente hacia el bosque de las almas perdidas
- Sera un largo viaje- dijo Gena Bostezando
Mientras se adentraban en el bosque, los arboles parecían cada vez más grandes. Un sendero de roca, construido por los mismos thalianos y con algunas estatuas en el camino que parecían reflejar a Ur Elegnia seguía firme hasta perderse el horizones. Unas pequeñas partículas de luz parecían flotar en el aire, eran de varios colores
- Wooow, ¡que bonitas son!- dijo emociona Lynel- ¡Mira Sjekir!

Este fingió ignorar las luces y sumergirse en un profundo silencio

- Sjekir…
- Que recuerdos…- dijo Terry
- ¿A que te refieres?- pregunto Jana
- Vamos, intenta agarrar una luz con tus dos manos.
- ¿Y eso para que?
- Hazme caso, ¡anímate!

Jana puso sus dos manos juntas y logro encerrar una pequeña luz, sus dos manos alumbraron.

- Ahora pide un deseo…
- ¿Un deseo?
- Si, pídelo se hara realidad. Son las lagrimas de Elegnia…
- No sabia que ella lloraba…
- Pidelo y te contare su historia.

Jana cerró los ojos y pidió en secreto poder encontrar al asesino de sus padres. Luego suspiro. A su lado Anakair parecía ensimismado, rezando arrodillado y concentrado en sus propios pensamientos.

- Bueno, ahora si cuéntame la historia
- Veras, fue una historia que me conto mi padre hace mucho…la leyenda cuenta que en la época de las grandes tormentas cuando casi la humanidad es destruida por el caos y la ambición de Ur Evilnuri. Ur Ignuri, Ur Terra y Ur Sofhtia se compadecieron de los humanos, elfos, enanos y lloraron al ver sus desdichas y sufrimientos. Solo Ur Elegnia permanecía impasible ante el clamor de las criaturas
- ¿Y eso porque?- pregunto curiosa Jana
- Porque Elegnia es la justicia, la justicia no llora, la justicia trata siempre de ser objetiva y apegarse al marco de las leyes.
- Comprendo…¿Pero era un mundo sin leyes no?
- No realmente…, hasta en un mundo devastado pueden existir leyes, leyes tiránicas y despóticas, pero leyes al fin y al cabo.
- Pero…¡Es cruel!, como una diosa del bien puede no conmoverse…
- Ya ya…déjame terminar la historia. La cosa es peor de lo que te imaginas…Por que paso que…- dijo Terry y empezo a tarararear una música de suspenso.
- ¡AAAhhh!- protesto Rik- asi es Terry, no se puede escuchar una historia de el. Se demora en contarla y por lo general lo deja a uno enrollado.
- Paciencia, paciencia…Evilnuri implanto su trono en la tierra y sometio a todas sus criaturas a las cuales tenia como esclavos, fue por esa época que decidio experimentar con las criaturas buenas para crear su propia raza de siervos fieles. Evilnuri quería un ejército indestructible y feroz de seres malvados. Peligrosos nigromantes, caprichosos clérigos y paladines caidos servían al dios ya, además de enormes y poderosos demonios que volaban y azotaban con sus látigos a todas las criaturas por el simple placer. La cosa es que los Urs buenos solo podían actuar para salvar a Epica de su destrucción si todos se ponían de acuerdo a hacerlo. Pero Ur Elegnia se resistia a participar argumentando su objetividad y su apego a las leyes que fueran impuestas.
- ¡Que horror!- dijo Lynel quien también escuchaba con atención la historia
- Pero llegaría el momento, en que todo cambiaria…, una noche cuando las calabazas aun florecían al revés, Elegnia lloro, por primera y única vez en toda su existencia…
- ¡Como!- dijo Jana- ¿como fue posible aquello?
- Esta historia continuara…
- ¡Te odio Terry!- dijo Jana cruzada de brazos-no eres serio
- Ya ya..esto fue lo que sucedió…¿Qué pasa cuando la justicia entra en contradicción consigo misma?
- ¿Qué quieres decir?
- Elegnia vio algo que la dejo atónita, algo a lo que no se podía resistir. Un pequeño niño de una aldea al sureste del actual territorio de Valhadia llamado Tik una noche rezo al cielo y en un pequeño dibujo ilustro su pequeño sueño, un monte lleno de colores, donde todos estaban abrazados y eran felices, donde solo había cabida para el amor. El niño pidió con fuerza aquel deseo, que la diosa al principio solo decidió ignorar…
- Entonces…NO PARES- le grito Jana
- Ya ya…la verdad no es una parte fácil de narrar. El niño a pesar de sus desgracias, era un niño feliz. Amaba la naturaleza, sus pocos amigos y por todo parecía mostrar un amor y un interés elevado. Con nadie se metia y era feliz en su humilde vida. Pero, ese mismo dia, el niño fue brutalmente asesinado por dos soldados de Evilnuri que simplemente estaban apostando un vaso de cerveza a quien era capaz de bajarse el niño con una pequeña hacha…
- Creo que ya no me gusta esta historia…- dijo Jana tapándose la boca
- Creo que hay detalles que podrías omitir Terry…- dijo Rik
- Bah!, si no hay sangre no hay interés…En fin, Elegnia entonces lloro y estas dicen son sus lagrimas que permanecieron para siempre en el bosque. Elegnia cambio para siempre, pues comprendio que la justicia no estaba solo en las leyes, sino también en el corazón…dicen que la diosa revivió al niño y lo transformo en un ángel…
- Tik…- dijo Rik- no me digas que es…
- Tikal, el mensajero de la justicia, el ángel de la mascara. Si es el. Ahora siempre ha existido entonces la tradición que si cierras tus dos manos en una de estas lagrimas podras pedir un deseo y Elegnia te lo concederá
- Yo quiero intentarle!- dijo Lynel quien junto sus dos manos alrededor de una particula
- Hummm…-dijo Gena- creo que olvidaste contar muchos detalles de la historia. Como por ejemplo como Gotthard y los enanos les salvaron el trasero a los humanos y a los elfos en aquella ocasión. ¿Sabias que Fadelein, la espada sagrada de Ignuri fue construida por Gothard y sabios enanos artesanos?
- Ya ya, habrá mucho tiempo para mas historias- dijo Terry- apuesto a que te mueres por pedir un deseo
- No puedo negarlo- dijo la enana que no pudo evitar pedir prosperidad para su negocio.
Y asi animados continuaron caminando, acercándose cada vez mas a Tenacrox que los llevaría lejos de Thalion.