Doryan y Ervelin en Buenos Aires

Un dia en un cafe en Buenos Aires, un mago y un guerrero se reencontraron. Doryan saludo al viejo mago y alzo su boina. Mientras Ervelin saludo afectuosamente a su viejo amigo.

- Los tiempos cambian amigo mio- dijo Doryan
- Si, estamos más viejos y cada vez empiezo a sentir mas el peso de mis desiciones y de tantos sueños que quise construir...-dijo Ervelin
- Igual, ahi siguemos amigo. Luchando uno junto al otro. Espada con espada ¿o seria mejor espada con cayado?
- jajaja, ¡Mesero! traigame un submarino, quiero algo caliente y reconfortante
- Yo prefiero un cafe irlandes- dijo Doryan- ¿Que nos espera ahora viejo amigo mio?, ahora que la oscuridad se apodera del mundo y que no queda sitio para aquellos que aun creemos en la fantasia y la magia
- No lo se- dijo Ervelin- a veces suelo pensar, que al menos mientras uno de nosotros mantenga la llama viva, mientras uno de nosotros siga forjando poesia epica y fantastica, aquel mundo soñado seguira existiendo. Nosotros somos parte de la magia y nos corresponde a nosotros seguirla alimentando.
- Sip- dijo Doryan tomando el cafe lentamente- esta listo todo el plan ¿verdad?
- Pues...estoy en ello, conseguiremos algunas armas, uno que otro voluntario y listo...
- Aaaaahhh paraguayos mamawebos de ercoño- dijo doryan furibundo- las pagaran
- Recuerda los objetivos son alquilar dos drakkar, quemar iglesias y quedarnos con las virgenes...
- Entonces moriremos de hambre
- jajajaja

Una triste milonga sono de fondo, mientras aquellos dos viejos amigos, se encontraban por primera vez y grababan en un lienzo mnemotecnico de pinceladas artificiales para intentar lograr una especie de eternidad del momento, de un segundo, de un momento creador.

(clic en la foto para verla completa)

Woooo qué genial!!!
Seguro la pasaron del uno XD

Qué conversación más...educativa XDDDD

Qué bueno que se hayan juntado, me imagino que la debieron haber pasado muy bien .
Y Buenos Aires tiene lugares muy bonitos...muchas cafeterías están finamente decoradas. La última vez que fui, estaba en Retiro con la Ana y mi mamá, tomando chocolates calientes y escuchando a un pianista y a un cantante de tango....se pasan tardes muy agradables.